Paola García Lozano ya es un nombre que resuena en el mundo del deporte por conseguir ceñirse la corona de campeona de Europa en karate absoluto a los 17 años. Título que los siete últimos años, antes de retirarse, llevó a sus espaldas la karateca Sandra Sánchez, hoy con una medalla de oro olímpica en su palmarés. Para Paola ésta ha sido su primera gran competición internacional en la modalidad de katas y en su vuelta a Madrid para retomar los entrenamientos, hemos querido aprovechar un ratito a solas con ella para que nos cuente cuáles son sus impresiones tras el triunfo, cómo gestiona las expectativas que hay puestas en ella y en qué referentes se fija a la hora de marcar el camino de su carrera deportiva que por el momento parece que estará llena de éxitos. Esto es lo que nos ha contado.
Primero de todo darte la enhorabuena por tu triunfo en el Europeo, ¿qué sensaciones tienes al volver a casa con la medalla de oro?
P: Muy feliz, viví el campeonato con muchísima intensidad y lo disfruté desde el primer momento. Además tuve la suerte de tener a toda mi gente aquí y la verdad es que fue increíble. Ahora estoy asimilando el resultado y volviendo otra vez a la realidad para los próximos objetivos. Me ha cambiado la manera de enfocar la temporada pero yo creo que mi equipo y yo lo estamos haciendo muy bien y lo estamos disfrutando todo mucho.
Esto marca un antes y un después en tu carrera deportiva, ¿qué va a cambiar a partir de ahora?
P: Pues precisamente hace unos días hablaba con mi entrenador sobre cómo nos ha cambiado la temporada desde hace unos meses hasta ahora. Después de esto tenemos algunas pruebas que son importantes pero la más significativa es que gracias a este oro nos hemos clasificado directamente para ir a los Juegos Europeos en Polonia que se celebran en junio y preparar esa competición es el objetivo más importante que tenemos en mente.
Después de este hito, ¿vas a tomarte unos días de descanso o vuelves a tope con los entrenamientos?
P: Ahora he tenido unos días de descanso sobre todo para asimilar y desconectar la mente que es tan necesario y que de alguna manera también forma parte del entrenamiento pero ya estamos de vuelta, estamos volviendo al tatami para entrenar otra vez.
Además de la parte más técnica de tus entrenamientos, ¿haces otros entrenamientos específicos para mantenerte en forma?
P: Tengo un preparador físico que es con el que llevo toda la parte de preparación física y luego tengo una parte técnica que también llevo con mi entrenador.
En cuanto a la parte del físico realizamos ejercicios específicos para mejorar mis katas. Trabajamos la velocidad, la resistencia, la fuerza pero todo esto enfocado al karate que es realmente lo que nos importa. Que el día que tenga que competir y dar el 100% pueda dar mi máximo en todo momento.
En cuanto a la alimentación, ¿te marcan una dieta específica como deportista profesional o eres tú la que gestionas lo que comes?
P: En cuanto a la alimentación, llevo mi dieta específica que me ayuda a rendir mejor a la hora de competir. Pero la verdad es que como bien, no me supone ningún problema.
¿Cómo empezaste en el karate y en qué momento empezaste a plantearte llevar el hobby al ámbito profesional?
P: Empecé con 4 años porque mi hermana también practicaba karate y la acompañaba todos los días al gimnasio a entrenar hasta que me dejaron entrar. Insistí mucho (ríe)
Yo he disfrutado siempre con este deporte, aunque también he practicado otros muchos, pero cuando subes de nivel y vas escalando de categoría la exigencia ya no es la misma por lo que al final te tienes que obligar a decantarte y centrarte en un solo deporte, yo lo hice con el karate. Y cuando ya decidí profesionalizarme -el año pasado sobre todo- me vine a Madrid para poder estar más centrada porque al final aquí me pilla todo más cerca y me permite llegar a todo sin tanto esfuerzo.
¿Cuáles son tus referentes deportivos a la hora de seguir adelante?
P: Dentro de mi deporte por supuesto tengo a Sandra Sánchez y a Damián Quintero que son los que nos han abierto muchas puertas pero yo tengo siempre a Carolina Marín en mi cabeza como referente. Es una deportista impecable y creo que es un buen ejemplo a seguir. Me encanta cómo trabaja y la forma con la que gestiona todos los momentos.
¿Cómo gestionas las expectativas que se generan de ti antes de enfrentarte a una competición tan importante como la que acabas de ganar?
P: La parte mental creo que es uno de mis puntos fuertes por suerte. Creo que lo gestiono todo bastante bien y esa presión intento llevarla siempre al lado positivo para que me ayude a dar el 100% en esos momentos difíciles de tensión máxima. Intento que nada de eso me afecte negativamente y que lo positivo que saco de todo me ayude a confiar en mí, en mi trabajo y a salir a disfrutar al tatami a hacer lo que realmente me gusta: entrenar y competir.
¿Cuál es la mayor meta que aspiras alcanzar?
P: Bueno pues ya sabes que el sueño olímpico es algo que nos han arrebatado a todos los karatecas por desgracia. Ojalá podamos volver a ser olímpicos y por supuesto ese sería mi sueño más grande. Como eso de momento no puede ser, llegar a ser campeona del mundo es el objetivo más alto que se me viene a la cabeza y con el que soñamos todos los karatecas.
Qué consideras que es lo mejor y lo peor de tu deporte
P: Lo mejor es que te aporta muchísima disciplina y respeto. Es un deporte con el que aprendes mucho por todos los valores que te inculca y por lo que significa desde su origen. ¿Lo peor? Pues la verdad que no sabría decirte. Quizá que es un deporte en el que juega un papel importante la subjetividad pero al final es algo con lo que tenemos que aprender a lidiar e irnos adaptando a todos los momentos según vayan surgiendo durante la competición.
